Este compuesto se usa para aliviar la comezón, el dolor y la molestia por la irritación leve de la piel debida a múltiples causas y tiene la capacidad astringente suave, antiséptica, protectora, absorbente de la humedad y las secreciones, y es suavizante.
En el caso de la dermatitis atópica, la presencia de picor es constante y, en ocasiones, interfiere de forma importante en el descanso nocturno; el niño muestra nerviosismo, desazón y se rasca continuamente sin poderlo evitar. La calamina, en este caso, ofrece un remedio eficaz para el picor con una más que buena tolerancia al tratamiento por parte del paciente. El óxido de zinc que contiene no es soluble en agua y absorbe la humedad de las zonas que exudan, manteniéndolas secas. Por otra parte, esta loción resulta muy refrescante y mantiene la piel suave y libre de infecciones.
Es un remedio muy antiguo y ha mostrado a lo largo de décadas su eficacia y su seguridad.
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